Libros libres | Javier Villafañe, cuentista y cabalista
28/12/2025.- A menudo recuerdo los días transcurridos en la hermosa ciudad andina de Mérida, cuando, a inicios de los años setenta, me trasladé allá a cursar estudios de Letras en la Universidad de los Andes. Mientras me capacitaba con profesores notables, también tuve contacto con escritores que laboraban en la ULA en distintas dependencias: en la revista Actual (dirigida por Salvador Garmendia), en el Departamento de Cine (con Carlos Rebolledo y Tarik Souki), con Carlos Contramaestre (en el Cegra) y con Javier Villafañe, quien dirigía la pequeña librería El Caracol.
Villafañe venía de la Argentina y, enamorado de Venezuela, montó un teatro de títeres. También se dedicó a escribir cuentos inspirados en la tradición oral. Fueron publicados en Mérida bajo el título de Los cuentos que me contaron y tuvieron mucho eco entre nosotros debido a toda la fuerza que transmiten.
Vivía con su mujer, Lucrecia, pintora, mujer genial, y ambos nos recibían en una casa bohemia muy hermosa, poblada de pinturas, títeres, libros, vinos y tertulias maravillosas.
Javier planificaba rutas para ir con su teatrino y sus cuentos de camino por varias rutas, entre ellas la del Quijote y Sancho Panza por los campos de Castilla en España, haciéndose por ello famoso en varios países. Iba con su overol, sus sandalias, su sombrero y su blanca barba y ojos azules, como un poeta trashumante recorriendo tierras de varios países.
Un día mostré a Javier mis cuentos breves y le gustaron tanto que los envió a una página literaria en Minas Gerais, Brasil, donde los tradujeron al portugués e ilustraron con dibujos bellísimos. Había sido esta mi primera publicación en el exterior —junto a una aparecida en la revista El Cuento de México— y sus textos formarían parte del cuerpo de mi primer libro, Los dientes de Raquel (1973), editado en Mérida.
Me ha alegrado mucho ver ahora, después de tantos años, un libro de cuentos de Javier Villafañe recién editado en Argentina: La cucaracha. Publicado por Ediciones de la Gente (2020), lo pude adquirir en la Feria Internacional del Libro celebrada en Caracas en noviembre pasado. El volumen recoge quince piezas breves de la producción de Javier, presentadas por su hijo Juano Villafañe. Este anota al principio:
Estos cuentos justamente nacen de esas historias que le contaron a Villafañe o que él mismo inventó cuando andaba por el mundo. Se dará cuenta el lector de que se trata de una literatura vivida, muy bien escrita y poseedora de la vigencia de los clásicos.
Estos cuentos de La cucaracha se publicaron a los 111 años del nacimiento de Javier. Fue muy oportuno, pues Javier gustaba de los números impares y, como aclara Juano, el juego de lo indivisible y a la vez lo impar permite sumar a su propio par. Le seducía encontrar la magia y que esta lo encontrara siempre en el camino. Les dijo a sus hijos que había que estar siempre preparado para todo, y que un titiritero, poeta o narrador tenía que saber armar su propio juego de cábalas artísticas, para que los calendarios tuvieran siempre en cada día una esperanza para vivir y soñar desde el amanecer hasta la noche.
Salud a tu obra y figura, Javier Villafañe.
Gabriel Jiménez Emán
