18/12/25.- La voz de Venezuela resonó con firmeza en defensa de la soberanía y la autodeterminación de los pueblos en la Organización de Naciones Unidas (ONU).

El embajador permanente ante la ONU, Samuel Moncada, fue el encargado de transmitir el mensaje del gobierno del presidente Nicolás Maduro, condenando las nuevas formas de colonialismo que, según denunció, buscan someter a los países independientes mediante métodos económicos, políticos y mediáticos.

Denuncia del bloqueo y la agresión externa

Durante su intervención, Moncada alertó sobre el peligroso precedente que significa el reciente anuncio del gobierno de Estados Unidos, que el pasado 16 de diciembre comunicó la aplicación de un bloqueo naval y aéreo contra Venezuela.

"El presidente de los Estados Unidos de América anunció al mundo que las tierras y el petróleo venezolano le pertenecen y que deben serle entregadas de inmediato, pues en caso de que no se cumplan sus órdenes, la Armada más poderosa de la historia efectuará un bloqueo a Venezuela", denunció el diplomático ante la Asamblea.

Moncada calificó este acto como una "grotesca ofensa" que viola todas las normas de derecho internacional, desde la Carta de las Naciones Unidas hasta la Convención del Derecho del Mar. "Eso es el colonialismo, un crimen de agresión. Los Estados Unidos están imponiendo el caos y la destrucción en las relaciones internacionales", enfatizó.

Agregó que la diplomacia de la fuerza no tiene cabida en el siglo XXI y que Venezuela defenderá su soberanía por todos los medios legales.

El colonialismo bajo nuevas máscaras

El representante venezolano insistió en que el colonialismo actual no solo se manifiesta en la ocupación militar tradicional sino también a través de prácticas como las medidas coercitivas unilaterales, el abuso del poder financiero global, la apropiación de recursos naturales y la injerencia en los asuntos internos de los países.

"La dominación colonial opera con nuevos métodos, pero igualmente perniciosos. Incluyen la coerción económica, la presión financiera y campañas mediáticas para desestabilizar estados soberanos", explicó.

Moncada hizo un llamado a la comunidad internacional a rechazar el uso de sanciones y bloqueos como instrumentos de presión para forzar políticas ajenas a la voluntad de los pueblos. "Estas son manifestaciones de colonialismo y neocolonialismo", recordó.

Solidaridad con los pueblos aún colonizados

En su discurso, el embajador venezolano extendió su solidaridad a los 17 territorios no autónomos reconocidos por Naciones Unidas y a otros pueblos como Palestina y Puerto Rico, que aún esperan el pleno ejercicio de sus derechos inalienables. “Exhortamos a las potencias administradoras a que respeten los derechos de los pueblos, sus tierras y recursos naturales, y se abstengan de realizar actividades que socaven su soberanía”, subrayó.

Moncada recordó que la Asamblea General de la ONU ha proclamado, desde hace 65 años, el derecho de todos los pueblos a la libre determinación y que la persistencia del colonialismo, en cualquiera de sus formas, es incompatible con la paz, el desarrollo y los derechos humanos.

Compromiso del Gobierno Bolivariano

El gobierno del presidente Nicolás Maduro, a través de su representante, reiteró su compromiso de mantener la lucha por la justicia internacional, la igualdad soberana y la independencia de los pueblos. "La República Bolivariana de Venezuela defenderá su soberanía, integridad territorial e independencia en todos los campos necesarios para mantener la paz y la seguridad de la nación", declaró Moncada.

Finalmente, Venezuela reafirmó su liderazgo en la denuncia de las prácticas neocoloniales y su solidaridad con los pueblos aún sometidos a dominación extranjera, invitando a la comunidad global a redoblar esfuerzos para erradicar definitivamente el colonialismo y sus nuevos disfraces.

"Un mundo libre del colonialismo es aquel donde todas las naciones, grandes o pequeñas, pueden elegir su propio camino sin miedo, coacción ni tutela", concluyó Moncada, en clara defensa del derecho de Venezuela y de todos los pueblos a decidir su destino.

ISAÍAS OVALLES / CIUDAD CCS