16/12/25.- El representante permanente de la República Bolivariana de Venezuela ante las Naciones Unidas, Samuel Moncada, presentó este martes ante el organismo un comunicado oficial, dirigido al presidente del Consejo de Seguridad, Samuel Žbogar, en el que se señala que se trata de un robo de cargamento petrolero ejecutado por el Gobierno estadounidense, acción que vulnera principios básicos del derecho internacional.

La comunicación oficial precisa que, tras el ataque, varios tripulantes permanecen desaparecidos y no se han ofrecido respuestas sobre su paradero. 

El texto subraya que este hecho constituye una agresión contra la nación y se enmarca en la definición de piratería marítima establecida en el artículo 101 de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, que tipifica como piratería todo acto ilegal de violencia, detención o depredación contra buques o bienes.

Cabe resaltar que, previo a la entrega del documento, el canciller de la República, Yván Gil, a través de su canal en la plataforma Telegram, había expresado que la acción fue ejecutada contra un barco privado dedicado al comercio internacional lícito que transportaba petróleo venezolano.

Gil señaló que los tripulantes fueron secuestrados y que incluso a la fecha de hoy permanecen desaparecidos.

El canciller afirmó que la denuncia se realiza en nombre del presidente Nicolás Maduro y del pueblo venezolano.

En el comunicado también se expresa de manera enfática que el país no cesará sus actividades comerciales.

"Venezuela continuará ejerciendo su derecho soberano e inalienable a comercializar legítimamente sus recursos y exigir que ninguna operación legal sea objeto de robos, secuestros o actos de piratería", refirió el jefe diplomático sobre el texto del documento.

El Gobierno venezolano ha insistido en que la acción del Gobierno estadounidense constituye un acto de piratería gravísimo, que merece que el Consejo de Seguridad lo investigue y analice en profundidad, debido a que involucra el uso de la fuerza en aguas internacionales y la desaparición de tripulantes civiles.

Reclamo sostenido

Cabe resaltar que, desde el 10 de diciembre, cuando ocurrió el incidente, Venezuela ha reiterado que el robo del buque petrolero constituye una violación del derecho internacional, al tratarse de una embarcación privada que realizaba comercio lícito.

Las autoridades venezolanas han asegurado que la operación estadounidense en alta mar no solo vulnera la libertad de navegación, sino que representa un precedente peligroso para la seguridad marítima en la región.

La carta entregada ante la ONU subraya que los tripulantes continúan desaparecidos, un elemento que Caracas considera central para exigir una investigación internacional y la intervención del Consejo de Seguridad.

Los sucesos

El hecho ocurrió el pasado 10 de diciembre de 2025 en aguas internacionales del Caribe, cuando un barco privado dedicado al comercio legítimo de petróleo venezolano fue interceptado y retenido.

La tripulación fue secuestrada y hasta la fecha continúa desaparecida, lo que acentúa la gravedad del caso.

Finalmente, el documento leído por Moncada reafirma que Venezuela exigirá que ninguna operación legal sea objeto de actos de fuerza, secuestro o piratería, independientemente de su origen.

REINALDO J. LINARES ACOSTA / CIUDAD CCS