Al derecho y al revés | Citgo como modelo
10/12/2025.- El tema de este final de año es la ilegal venta de Citgo y no por las violaciones a las leyes internacionales, yanquis y venezolanas que sirvieron de base a tan vil acto, sino por las consecuencias que acarrean.
No se trata de copiar y pegar los artículos de leyes a reclamar que a míster Trump poco le importan, o de calcular cuántos millones nos roban y de esa suma cuánto le toca a cada miembro de la miserable directiva que, según el juez, son quienes deben representar a Venezuela al estampar con sus firmas tan ruin venta.
Eso ya está dicho y no había que ser augur persa para pronosticar que entre Guaidó y sus compinches entregarían Citgo a cambio de migajas que, sin embargo, les permiten a estos delincuentes vivir cual magnates el resto de sus pobres vidas sin trabajar.
Este nuevo y, por los momentos, “penúltimo robo” al país por parte de la oposición que algunos llaman “dura”, hay que verlo más por los hechos que no añaden nada al último cuarto de siglo, pero que sirven para desenganchar a los pocos ilusos que escuchan las promesas bobas de MCM y su combo.
Dice la supuesta víctima de un gobierno que al menos desde 2014 pudo meterla en chirona, viajera por avión para Europa en momentos en que el gobierno de míster Trump intenta derrocar al presidente venezolano, declarando, sin derecho, el cierre de nuestro espacio aéreo.
Acción que deja a decenas de miles de venezolanos varados en Europa y el mundo, dice la niña que si ella —MCM— llega a Miraflores, privatizará todo y habría trabajo para todos, sueldos dignos —lo cual causa extrañeza saliendo esta promesa de una persona que nunca ha trabajado— y se podrán comprar automóviles y casas, etcétera.
Bien, la heredera de la Guipuzcoana puede decir en adelante hasta misa, si consigue incautos para engatusar.
Pero los hechos privan y la entrega disfrazada de venta de Citgo a los estadounidenses vislumbra mal futuro en caso de que MCM llegara a Miraflores.
Tratemos de evitar pánico y ser pedagogos hasta donde se pueda: María Corina hasta el momento ha demostrado una incapacidad para poner a rodar ideas, al punto de que hay quien dice que la niña carece de materia gris.
Es que se cree autosuficiente y, para peor, su entorno es tan pedestre que, aparte de aplaudir cualquier bobería de MCM, no sirven para nada o para muy poco, aparte de adular a la mantuana.
En un gobierno de MCM se dejaría al Estado atado de manos y sin siquiera un arma para defenderse: privatizarían hasta el agua al estilo Milei en Argentina, desmantelarían el Ejército Nacional Bolivariano, y no lo harían para que el pueblo tuviera, digamos, bolsas CLAP más buchonas y baratas.
Vendría un remedo de la venta de Citgo, compañía que al Estado venezolano le permitía tener mejores beneficios para el pueblo más pobre que podría soñar con un futuro mejor.
A esos venezolanos los maricorinos les rompieron el sueño.
Pero también al pueblo de clase media cuyos hijos “nerds” soñaron con trabajar en Citgo para poder destacarse y usar la empresa como trampolín a otros destinos; a esos también les destrozaron los sueños esa caterva de Guaidós, Vecchios, Borges, López, Dinorah Figuera y otros que servirían de marionetas en un imposible e hipotético gobierno venezolano, puesto por los marines yanquis sobre muertos venezolanos.
Y, finalmente, el mal ejemplo de Citgo acabó hasta con los sueños de la burguesía venezolana que siempre ha intentado asociarse a Pdvsa como primer paso a una privatización; en el caso Citgo ya lo veremos. Los sinvergüenzas aparecen para dar una ridícula legitimidad a la venta, amén de alguna comisión bajo la mesa, pero, como propietarios, no habrá venezolanos, ni siquiera gringos comunes.
Estos sinvergüenzas trabajan para grandes corporaciones y su opinión allá no vale nada.
Domingo Alberto Rangel

