70% de los estadounidenses se opone a una acción militar en Venezuela

Pueblo de EEUU no se considera amenazado y opina que no bajaría el ingreso de drogas

La agresión del Gobierno de Trump contra la nación suramericana ha provocado protestas en suelo estadounidense.

 

23/11/25.- Una encuesta de la televisora estadounidense CBS News revela profundas divisiones al interior de ese país sobre las políticas hacia Caracas. El 76% considera que la Casa Blanca no ha explicado su posición, mientras crece el escepticismo incluso dentro del Partido Republicano.

La acción militar estadounidense en Venezuela enfrenta un amplio rechazo: el 70% de los estadounidenses se opone a cualquier intervención, según revela una encuesta de CBS News/YouGov y replicada por Telesur, que expone las profundas fracturas en la opinión pública sobre las políticas de la administración Trump hacia el país suramericano.

Los datos dibujan un panorama inequívoco, apenas el 24% de los consultados considera que el gobierno ha explicado claramente su posición sobre Venezuela. Una abrumadora mayoría —76%— afirma que la Casa Blanca no ha ofrecido claridad sobre sus intenciones, evidenciando un déficit comunicacional que atraviesa todas las líneas partidistas.

Esta falta de transparencia alimenta la desconfianza. Tres de cada cuatro estadounidenses sostienen que Trump necesitaría aprobación del Congreso antes de emprender cualquier acción militar en Venezuela, una exigencia que comparte más de la mitad de los propios republicanos. El mensaje es directo, no cuenta con la legitimidad para la guerra.

 

Fracturas republicanas

El sondeo, realizado entre el 19 y 21 de noviembre, con un margen de error de ±2.4 puntos porcentuales, revela grietas importantes dentro del Partido Republicano. Mientras 66% de los republicanos afines al movimiento MAGA respalda una posible intervención, solo 47% de los republicanos no-MAGA la apoya. Entre estos últimos, 53% se opone directamente a cualquier aventura militar.

Esta división interna expone los límites del discurso belicista incluso en las filas del partido gobernante. La base MAGA, históricamente complaciente con Donald Trump en temas de política exterior —como demostró con el bombardeo en Irán meses atrás—, mantiene su lealtad. Pero el resto del espectro republicano muestra señales de fatiga ante una retórica que no conecta con sus prioridades reales.

La agresión unilateral de EEUU contra Venezuela incluso ha provocado manifestaciones y protestas en rechazo y denuncian “excesos autoritarios y amenazas a la democracia, por parte del mandatario estadounidense.

Venezuela: una “amenaza” fabricada

De acuerdo con el estudio de opinión de CBS, la percepción pública desmonta el discurso oficial. Solo 13% de los encuestados considera a Venezuela una “amenaza mayor” para la seguridad estadounidense. 48% la califica como “amenaza menor” y un significativo 39% sostiene que no representa amenaza alguna.

La guerra no resuelve el narcotráfico

El pragmatismo ciudadano se impone cuando se evalúa la efectividad de una intervención militar. El 56% de los consultados cree que una acción bélica no cambiaría la cantidad de drogas que ingresan a Estados Unidos. Solo 37% piensa que las reduciría, mientras un marginal 7% considera que aumentaría el flujo.

Esta incredulidad se extiende a las operaciones actuales. Los ataques contra embarcaciones sospechosas de narcotráfico dividen la opinión: 53% aprueba y 47% desaprueba. Pero aquí surge un consenso: 75% exige que el gobierno muestre evidencia de que los barcos atacados realmente transportan drogas.

La ciudadanía reclama transparencia antes que acción. Reclama pruebas antes que bombas. Reclama política exterior sustentada en hechos, no en sospechas.

Las verdaderas prioridades

Detrás del rechazo a la intervención hay una cuestión más profunda, es el cuestionamiento de las prioridades gubernamentales. Muchos opositores a la acción militar —incluidos republicanos— son más propensos a juzgar a la administración por su gestión económica y consideran que no dedica suficiente tiempo a los problemas que realmente afectan sus vidas cotidianas.

La encuesta de CBS evidencia una desconexión entre el discurso de la administración Trump sobre inflación y la experiencia real de las familias estadounidenses: el aumento implacable de precios, el deterioro de las perspectivas económicas, la sensación de que mientras la Casa Blanca habla de victorias, sus bolsillos se vacían, reportó Telesur.

CIUDAD CCS


Noticias Relacionadas