Zach Plesacc comprometido con Magallanes
El equipo lo considera un importado de lujo

15/10/25.- Zach Plesac no llegó a Venezuela por un capricho del destino. El lanzador derecho, con seis campañas en las Grandes Ligas, aterrizó en Valencia con una mezcla de emoción, propósito y vulnerabilidad que lo convierten en una de las grandes historias de la importación del Magallanes.
“Es realmente emocionante. Es algo que me motiva e inspira a hacer algo grande aquí, con un gran propósito”, confesó tras su primera sesión de bulpén en el Estadio José Bernardo Pérez de Valencia. Aunque el viaje fue largo y el cuerpo aún se adapta, Plesac se siente sano, seguro y listo para competir.
Su vínculo con Magallanes no es casual. Conoce bien al coach de picheo Darwin Marrero, con quien trabajó en Memphis, filial Triple A de los Cardenales de San Luis. “Él es el pegamento. Me entiende, sabe cuándo estoy en mi mejor nivel y cuándo me estoy descarrilando”, dijo sobre el técnico que lo ayudó a construir hábitos sólidos durante la última parte de 2025.
Plesac, de 30 años de edad, comenzó el verano boreal con Long Island, de la Liga Atlántico (independiente) y sus números le ayudaron a conseguir un contrato con los pájaros rojos.
“El año empezó muy bien (4 juegos ganados y 1 perdido, con buena efectividad de 2,84 en siete aperturas). Luego de firmar con San Luis, tuve un comienzo difícil, como un mes o algunas semanas. Después, en medio de la temporada, sucedieron muchas cosas, pero cuando encontré mis rutinas, pude prepararme para el resto de la campaña. Creo que eso fue lo que pude aprovechar de esa experiencia: sentirme cómodo, establecer una rutina y sentirme bien”.
Plesac, originario de Crown Point, Indiana, dejó balance de 1 ganado y 8 perdidos y 7,67 de efectividad, en 15 juegos, 14 de ellos como abridor. Pero en sus últimas cinco presentaciones, pese a un récord de 0 y 2, su promedio de anotaciones limpias fue de 3,50, mientras limitaba a sus oponentes a un promedio de bateo de 206 y un jonrón. Con nueve boletos por 21 ponches en 18 innings lanzados. Mientras que mejoraba su porcentaje de rodados de 35% a 49%.
“Zach es un muchacho que todavía tiene mucho talento”, destacó Marrero. “Tuvo un comienzo bastante lento, pero fue mejorando conforme avanzó el calendario. En cierto punto, lo lamentamos, porque cuando termina la temporada, apenas había alcanzado el tope de su potencial. Eso fue lo que nos llamó la atención. Le quedan muchos innings por el resto del año. Así que se habló con la gerencia de San Luis y, gracias a Dios, nos dieron el permiso”.
La bienvenida ha sido cálida. “Además del coach Marrero, conozco a Sandy León, a otros de mis compañeros los he reconocido por sus nombres. Ha sido increíble”, expresó el serpentinero, quien también se mostró sorprendido por el ambiente de la ciudad. “Nunca había estado tan lejos de casa. Tengo esposa (Nicole, quien espera un bebe para diciembre) y una hija (Silvana). Es mucho, ¿sabes?, pero muy emocionante”.
Plesac no busca reinventarse, sino reafirmarse. “No creo que necesite mejorar nada. Solo salir y competir. Establecer un buen plan con el receptor y divertirme”, señaló.
Esos objetivos pasan por adaptarse al nuevo ambiente que lo rodea, con metas claras y, al mismo tiempo, honrar el sacrificio de estar lejos de su familia
“Es difícil prepararse para eso. Tuve un entrenador de habilidades mentales. Alguien que reajustó mis prioridades, para que al momento de elegir lo que me corresponde, todo sea amor y no solo arrepentimiento. Ya sabes, estar lejos de casa no es fácil. Entonces, ¿lo extraño y pongo excusas? No. Estoy aquí por algo más grande que mis sentimientos; estoy aquí para ayudar a Magallanes a ganar y, al mismo tiempo, para ayudar a mi familia. Es algo que debo aceptar y esperar que suceda, a medida que pasan los días”.
Darwin Marrero no da espacio para la duda, cuando habla de Plesac: “Es un importado de lujo”. “Tenemos que entender que estuvo establecido en una rotación de Grandes Ligas (con Cleveland) por aproximadamente cinco años”, argumentó el instructor de lanzadores del Magallanes.
Pese a ese pedigrí, el derecho no hizo mayores exigencias. “Salvo algunas preguntas sobre la ciudad, traslados y su estadía, no se mostró dubitativo. En general ocurrió con todos nuestros extranjeros. Vendimos un proyecto, la oportunidad de ser una plataforma para algunos de ellos”, puntualizó Federico Rojas, gerente deportivo del Magallanes.
Plesac se uniformó, soltó el brazo e hizo su primer bulpén y causó una grata impresión. “Estará listo, formará parte de la rotación desde el principio, se vio bastante bien, saludable. Es un muchacho súper trabajador, un profesional, un hombre de familia, un gran tipo dentro y fuera del terreno. Nos ayudará bastante”, abundó Marrero.
El choque de los eternos rivales
El clásico Caracas–Magallanes ya está en el radar de Zach Plesac. “Escuché sobre la rivalidad, los estadios, la pasión. Darwin (Marrero) me dijo que, si ponemos 40 mil latinos contra 80 mil gringos, los latinos serán más ruidosos. Ese es el ambiente en el que disfruto lanzar”, dijo con una sonrisa. Si todo se alinea, su última apertura será el 9 de noviembre en el Estadio Monumental Simón Bolívar, frente a los Leones.
Con energía, humildad y una historia que lo respalda, Plesac se suma a la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP) con la convicción de que un mes o menos, puede bastar para dejar huella.
Zach Plesac acompañó a su tío Dan Plesac en la consecución de sus primeras victorias en las Grandes Ligas contra los Yanquis y sus primeras derrotas contra los Medias Blancas. Dan, un lanzador zurdo que participó en 1.064 juegos durante 18 temporadas, entre 1986 y 2003 (Cerveceros de Milwaukee, Cachorros de Chicago, Piratas de Pittsburgh, Azulejos de Toronto, Cascabeles de Arizona y Filis de Filadelfia), ocupa el séptimo lugar en la lista de todos los tiempos en partidos lanzados.
Cifras
Con Sandy León como receptor, Zach Plesac transitó una de sus cinco aperturas de al menos 7 episodios durante 2020, con los Indios de Cleveland. Esa temporada, acortada por la pandemia de Covid-19, el derecho dejó balance de 4 ganados y 2 perdidos, con 2,28 de efectividad, en ocho aperturas.
CIUDAD CCS