Retina | Más que vivir
13/10/2025.- Una maquinaria de muerte ha sido esparcida muy cerca de nuestros mares. Entre olas y nubes, los enviados a matar son adoctrinados con la idea de exterminar a los proveedores de las mismas sustancias que consumen para tener mayor disposición al exterminio.
Ya no se usa la excusa de la libertad ni de la democracia. Un gigante que se consume a sí mismo por dentro, intenta hacer creer que es posible frenar la necrosis sistémica que se le ha instalado en el pecho.
Estados Unidos es hoy una sociedad de divisiones absolutas. Lo gobierna una élite fragmentada que solo se compromete con sus propias ganancias. Cada factor sueña con el momento de presenciar la ruina total de quien se sienta a su lado.
En sus palabras, parecen dominar las ideas de sentirse más grandes, mejor armados, más desalmados y más letales. Con el uso de barcos y aviones, desproporcionados, imponen la aniquilación de pequeñas lanchas con muy pocas personas, pequeñas, desarmadas y desafortunadas.
Con sus videos celebran su impunidad al matar. No se molestan por saber a quiénes mataron. La necesidad de ocultar los efectos de su proceso de necrosis imperial les insufla la locura de pretenderse dueños de todo el continente y de ser superiores a todo el resto de personas que lo habitan.
Nosotros, en cambio, nos empeñamos en más que vivir. Con muy pocas excepciones, somos un país que debate y se esfuerza cotidianamente por lograr un buen vivir sin exclusiones.
Nuestro empeño es la paz, la solidaridad, el poder popular, la justicia social. Sin importar a qué corriente política nos afiliamos, nuestra ciudadanía cotidianamente propone o debate sobre los esfuerzos y las decisiones que podrían acercarnos más a un buen vivir.
Sabemos que nuestra claridad, nuestra honestidad y nuestra disposición son los elementos que precisamos para alcanzar ese objetivo, porque contamos con inmensos recursos en nuestro suelo para hacer realidad ese sueño.
Son, precisamente, esos recursos los que quiere robar esa maquinaria de muerte, integrada por gente que, en caso lograr exterminar a venezolanas y venezolanos, no recibirá nada del botín de los recursos que sean tomados. A ellos solo les tocará lo que puedan rapiñar a nuestra gente.
Mientras ellos tienen la tarea de matar y robar, a nosotros nos corresponde defender la casa de nuestros abuelos y la casa de nuestros nietos. Ellos carecen de razones. Nosotros tenemos una realidad, una historia y un propósito que se corresponde con la vida.
Freddy Fernández
@filoyborde