Xin chào | EE.UU. o el arte del engaño
¡Oh! Vietnam, país de casitas
De hombres de tamaño bajo
Sin embargo su hazaña
¡Qué brillante y grande es!
Melela (poetisa griega)
05/09/2025.- De falsos positivos está colmado el libro de cuentos del Pentágono, elaborado con la pretensión de justicar operaciones militares que le den dividendos a la Casa Blanca desde el terreno militar. Por eso no sorprende la historieta del “barco cargado de drogas, que fue hundido en la aguas del Caribe esta semana”, ¡procedente de Venezuela! Además, se supone que el cargamento iba rumbo a Estados Unidos, a pesar de que el mismo imperio había advertido por estos días que tenía vigiladas las aguas del Caribe con unos cuantos navíos, incluyendo un submarino nuclear. Extrañamente, el secretario de Estado, Marco Rubio, no ha dicho nada acerca de la vigilancia de las aguas del Pacífico, la ruta favorita del narcotráfico para llevar sin problemas su mercancía hacia la tierra de Donald Trump.
Las andanzas gringas por Vietnam, sobre todo durante los mandatos de Lyndon B. Johnson y Richard Nixon, entre 1963 y 1974, dan fe de las trampas montadas por los militares gringos para justificar operaciones militares contra el humilde pueblo vietnamita durante la etapa final de la agresión estadounidese en territorio indochino.
La falsa de Tonkin
El caso del supuesto ataque contra el destructor USS Maddox (agosto 2 de 1964), en el golfo de Tonkin, al norte de Vietnam, constituyó el argumento apropiado para que el Congreso de Estados Unidos, aprobara la Resolución del Golfo de Tonkin que equivalía a una declaración de guerra. Al unísono, el general William Wesmoreland, comandante de las tropas estadounidenses en toda Indochina, calificó de un viraje decisivo en términos de la mentalidad estratégica de guerra hacia Vietnam, de tal manera que la resolución autorizó al presidente Johnson a tomar las medidas necesarias de cara a cualquier ataque armado contra las fuerzas militares estadounidenses, a pesar de que estabam usurpando aguas extranjeras. Paso seguido, Johnson inició una ataque despiadado en el sur vietnamita, con los superbombarderos B-52, como punta de lanza, que centraron sus blancos con ofensivas en tapiz, el uso del agente naranja y bombas cargadas de napalm.
A finales de enero de 1968, las tropas vietnamitas sorprendieron en el sur con la Ofensiva del Tet, en 36 capitales provinciales, que significó el abandono de Johnson en la contienda por su reeleción. Ya derrotado políticamente, Johnson descartó la posiblidad de optar a la reelección, con lo cual le despejó el camino a Richard Nixon, de cara al sillón presidencial. Al salir airoso en las presidenciales, ipso facto, Nixon anunció la nueva estrategia de Estados Unidos en Vietnam, la cual denominó Vietnamización de la guerra, que finalmente fue un fiasco, tras la histórica derrota de la mayor fuerza militar aérea del mundo bajo el cielo de Hanoi y Hai Phon, durante las navidades de 1972.
Otro engaño fallido
Durante su campaña electoral, Nixon había prometido poner punto final al conflicto indochino, pero tras ganar las elecciones dio a conocer su nueva estrategia: La Vietnamización de la guerra, es decir, vietnamitas contra vietnamitas, para que no hubiesen víctimas estadounidenses.
Apoyado en su secretario de Estado Henry KIssinger, Nixon implementó una pantomima frente a a la prensa en París, asegurando que el Gobierno estadounidense tenía toda la voluntad de ponerle punto final a la guerra, acusando a los vietnamitas de no querer ceder y no reconocer que el sur de Vietnam tenía que ser libre del comunismo.
Desde el mes de marzo de 1972, Nixon, tras ganar la presidencia, olvidó sus promesas de paz y recrudeció los ataques aéreos y navales, siempre apuntalados por los bombarderos B-52. Tras ser desenmascarado por la prensa parisina, Kissinger se atrevió a asegurar a sus paisanos, en un mensaje dirigido a los estadounidenses, que sus hijos estaban a punto de regresar a casa, en un intento por buscar simpatía hacia Nixon, mientras las protestas contra la guerra arreciaban en todo Estados Unidos con miles de estudiantes y veteranos de guerra que habían regresado de Vietnam. Mientras tanto, The Washinton Post titulaba: “El bombardeo del terror en nombre de la paz. Esta derrota obligó al presidente Nixon y a su consejero aceptar el regreso a los acuerdos que ellos mismos habían rechazado en la mesa de negociaciones tres meses atrás”. Sin embargo, Nixon y Kissinger, seguros del triunfo con las armas, lanzaron su poderosa aviación contra la capital vietnamita.
Aquella batalla aérea, de 12 días y 12 noches, entre el 18 y el 29 de diciembre de 1972, nombrada Linebacker II, mostró ante el mundo una confrontación dificil de imaginar, en la cual la balanza se inclinaba asombrosamente hacia el lado del imperio estadounidense que apostaba por una victoria arrolladora de los invasores; sin embargo, el mundo se había quedado incrédulo a pesar de la mirada hollywoodense.
Cerca de la mitad de los B-52 de Estados Unidos (193 de 400 aparatos), realizaron 663 salidas desde la base Utapao (Tailandia) y la isla de Guan (en el Pacífico), mientras que un tercio de aviones tácticos de Estados Unidos (1.077) del total de 3.041, realizaron 3.920 salidas para intentar someter al pueblo vietnamita. Además, una cuarta parte de los portaaviones estadounidenses (6 de los 24) al lado de destructores, corbetas portamisiles y otros navíos de última generación se ensañaron contra el norte vietnamita. Solo el número de aviones tácticos era igual a la suma de las dos partes europeas, para entonces, digamos Gran Bretaña y Alemania, que sumaban 550 aparatos.
Según Luu Trong Lan, autor de La batalla de Dien Bien Phu en el cielo: Si Nixon no traicionaba los acuerdos de octubre y no ordenaba bombardear a Hanoi y Hai Phong con los aviones B-52, ha podido haber sufrido la derrota con honor. Por el contrario, sufrió una derrota mucho más trágica. Este es el resultado inevitable de un intento sucio sin antecedentes en la historia.
Por Ángel Bastidas
Consultas:
• Lan, T.L. (2004). La batalla de Dien Bien Phu en el cielo. Ed. The Gioi.
• Tuan, N.H. (2010). Vietnam: Guerra de Liberación. 1945-1975. Ed. The Gioi.