Ad libitum | Víctor Mendoza

El hombre detrás de la música

A la memoria de mi admirado Víctor M.

 

26/07/2025.- Le propongo un ejercicio a la gente de mi generación: busquen entre los discos de sus padres los de Oscar D’León, Tania, José Luis Rodríguez, Pecos Kanvas, Rudy Márquez, Edgar Alexander, la Billo’s Caracas Boys, la Dimensión Latina, Popy y cuanto LP consigan de la década del setenta. Miren la contratapa y fíjense en el nombre que se repite invariablemente en todas las producciones. Sin mucho esfuerzo, leerán Víctor Mendoza, en cualquiera de sus múltiples facetas: productor, artista gráfico, músico o compositor.

Él fue el hombre detrás de las carreras de un gran número de artistas y agrupaciones que cobraron fama y renombre en la década del setenta, cuando ostentaba el importante cargo de director artístico de TH Record, un verdadero emporio discográfico en el pináculo de nuestro negocio del disco.

El nombre de Víctor Mendoza también está asociado al de la agrupación Trío Venezuela, uno de los grupos vocales más relevantes de la farándula criolla del sesenta. Junto a ellos, inició su vida artística siendo muy joven, hacia 1955. Tocaba una guitarra con ciertas adaptaciones para que funcionara como un bajo y hacía la tercera voz. Con sus compañeros Luis Ferrebús, Gilberto Jiménez y Antonio "el Guajiro" Vásquez, recorrió toda América. Fueron protagonistas de primera fila del hit parade latinoamericano con piezas como Magia blanca y Quítate el saco. En el cenit de esta etapa de su carrera, actuó en El show de Ed Sullivan, en medio de la Expo Feria de Montreal de 1967, y le cambió el rostro a la gaita, sentando las bases para futuros experimentos al componer el tema Gaita con trompeta, que logró altas ventas durante la Navidad de 1968.

Al año siguiente, su deseo de superación lo lleva a dejar el Trío Venezuela para dedicarse a la composición, los arreglos, la producción musical y el diseño gráfico. Esta profesión la desarrolló en paralelo con la música desde su adolescencia, cuando se ganaba la vida dibujando para la revista Tricolor.

Durante su rol como director de TH Record, consolidó a la Dimensión Latina y a Oscar D’León.

En algunas ocasiones, compartimos cervezas y escuché de primera mano sus historias. Una de esas tardes me contó cómo creó el nombre artístico de Oscar D’León, con el apóstrofe, al recordar a un saxofonista de la orquesta de Billo del sesenta llamado Sócrates D’León.

Víctor participó en tantos trabajos memorables que, sin dudarlo, lo elevarían a la estatura de productores como Norman Granz o Mariano Rivera Conde.

 

Luis Ugueto Liendo


Noticias Relacionadas