NASA confirma detección de cometa que proviene de otro sistema solar
Según los astrónomos, 3I/ATLAS puede haber estado viajando por millones de años

04/07/25.- El telescopio de sondeo ATLAS (Sistema de Última Alerta de Impacto Terrestre de Asteroides), financiado por la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, más conocida como NASA, en Río Hurtado, Chile, reportó por primera vez observaciones de un cometa proveniente del espacio interestelar.
Tras analizar su trayectoria y velocidad, los científicos determinaron que se trata de un cometa interestelar, el tercero identificado en la historia moderna. Ha sido bautizado oficialmente como 3I/ATLAS.
Según un comunicado publicado en la página web de la agencia, se trataría del tercer objeto interestelar detectado hasta la fecha, y no representa una amenaza para la tierra
"El cometa no representa amenaza alguna para la Tierra y se mantiene a una distancia de al menos 1,6 unidades astronómicas (unos 240 millones de km)", dice el texto, que detalla que ese cuerpo celeste procede de la constelación de Sagitario.
Asimismo, indica que actualmente se encuentra a unos 670 millones de kilómetros de distancia del Sol, cerca de la órbita de Júpiter. Se desplaza a una velocidad de 59 kilómetros por segundo, y se espera que haga su aproximación más cercana al Sol a fines de octubre, pasando entre las órbitas de Marte y la Tierra, aunque más cerca del planeta rojo, a una distancia segura de 240 millones de kilómetros.
Astrónomos de todo el mundo están investigando el tamaño y las propiedades físicas del cometa interestelar. 3I/ATLAS debería permanecer visible con telescopios terrestres hasta septiembre, tras lo cual pasará demasiado cerca del Sol para ser observado. Se espera que reaparezca en el otro lado del Sol a principios de diciembre, lo que permitirá nuevas observaciones.
“Estos objetos tardan millones de años en cruzar de un sistema estelar a otro. Es probable que este cometa haya estado viajando por el espacio durante cientos o incluso miles de millones de años,” explicó Paul Chodas, director del Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra de la NASA. “No lo sabemos, así que no podemos predecir de qué estrella vino”.
Los astrónomos ya han realizado más de 100 observaciones del cometa desde su descubrimiento. Los primeros análisis indican que posee una cola prominente y una nube de gas y polvo —llamada coma— que envuelve su núcleo helado. Según Chodas, su brillo sugiere que podría ser significativamente grande, con un diámetro estimado de varios kilómetros.
“Durante décadas soñamos con observar objetos de otros sistemas estelares, y ahora finalmente lo estamos logrando,” dijo Chodas. “Es un visitante natural de otro rincón de la galaxia. No es artificial, aunque algunos se emocionen con la idea... es extraordinario.”
LUCILA CONTRERAS / CIUDAD CC