Pluma acústica | Palmieri: en vivo desde la cárcel y la universidad
26/06/2025.- Eddie Palmieri, también conocido como el Sol de la Música Latina, es una figura titánica cuya carrera ha estado marcada por la innovación, la audacia musical y una energía indomable. Si bien su discografía de estudio es vasta y aclamada, son sus álbumes en vivo los que a menudo capturan la esencia más pura y electrizante de su arte. Entre ellos, dos grabaciones se destacan como pilares fundamentales: In concert live at the University of Puerto Rico (1971) y Recorded live at Sing Sing (1972 y 1974). Estos discos no solo documentan momentos históricos y culturalmente significativos, sino que también encapsulan la maestría de Palmieri y su orquesta en la cúspide de su poder interpretativo, mostrando una salsa cruda, sin concesiones, que resonaba con la pasión y la rebeldía de la época.
Ambos álbumes son una clase magistral de salsa dura y fueron grabados en un período de intensa creatividad y experimentación para Eddie Palmieri, a principios de la década de 1970. Esta era fue crucial para la consolidación de la salsa como un fenómeno global y para la reafirmación de su identidad. Palmieri, ya para el momento un líder consolidado, estaba expandiendo los límites del género al infundir elementos de jazz, funk y R&B en su música, pero manteniendo siempre la raíz afrocubana y la improvisación como pilares.
Sing Sing
Recorded live at Sing Sing, lanzado en dos volúmenes (el primero en 1972 y el segundo en 1974), es quizás el más notorio de los dos. Grabado en la famosa prisión de máxima seguridad de Sing Sing, ubicada en Nueva York, en 1971, este concierto fue un evento sin precedentes en la música latina. No era la primera vez que Palmieri tocaba en una prisión, pero Sing Sing representaba un escenario con una carga simbólica inmensa. La decisión de tocar para una audiencia de reclusos no solo hablaba de la conciencia social de Palmieri, sino que también garantizaba una atmósfera de liberación y euforia.
La energía del público, palpable en las grabaciones, es un elemento tan crucial como la música misma, creando un diálogo único entre los músicos y los oyentes que raramente se captura en un estudio. La orquesta que acompañó a Palmieri en esa ocasión, la Harlem River Drive, incluía figuras destacadas de la salsa, con la sección de vientos rugiendo y la sección rítmica marcando el paso con precisión y fuerza abrumadoras.
Universidad de Puerto Rico
Por otro lado, In concert live at the University of Puerto Rico, también grabado en 1971, ofrece una perspectiva diferente, pero de igual potencia. Este concierto tuvo lugar en un entorno académico, frente a una audiencia estudiantil, que a menudo compartía la misma sed de cambio y expresión que la música que Palmieri encarnaba.
La presencia de su hermano Charlie (quien además fue su mentor) en el órgano Hammond añade una dimensión especial a esta grabación, otorgándole un sonido groovy y psicodélico. La anécdota de cómo tuvieron que convencer a las autoridades universitarias para que Charlie pudiera usar el órgano del teatro subraya el carácter pionero y, a veces, desafiante de los Palmieri. Por cierto, ese día Eddie donó un contrabajo eléctrico al campus.
La grabación en la Universidad de Puerto Rico, aunque quizás con algunas precariedades técnicas debido a su naturaleza en vivo, es un testimonio de la inmensa popularidad de los hermanos Palmieri en ese país y de su capacidad para conectar con una audiencia joven y efervescente.
Estilo audaz e irreverente
Palmieri es conocido por su enfoque jazzístico al piano, y estas grabaciones en vivo lo demuestran en su máxima expresión. Sus solos son impredecibles, llenos de giros armónicos complejos, disonancias audaces y un sentido rítmico impecable. En Sing Sing, la interacción con el público parece alimentar más su inspiración, llevando su interpretación a niveles de intensidad casi febriles. En University of Puerto Rico, la presencia del Hammond de Charlie añade otra capa de improvisación y diálogo musical entre los hermanos, creando texturas armónicas ricas y a menudo contrapuntísticas.
La orquesta de Palmieri en esta época era de un poder imparable. Los trombones y trompetas no solo marcaban líneas melódicas potentes, sino que también contribuían con "mambos" que impulsaban la energía de las canciones. La cohesión y la ferocidad de los metales son evidentes en ambos discos, lo que demuestra la disciplina y el talento de sus músicos. Entre ellos estaban José Rodríguez, en el trombón, y Ray Maldonado, junto a Alfredo "Chocolate" Armenteros, en las trompetas, mientras que Ronnie Cuber se destacaba en el saxofón.
La sección rítmica es el corazón palpitante de la música de Palmieri. En estos conciertos el pulso es impecable. La interacción entre los percusionistas es un verdadero espectáculo, construyendo una base rítmica sólida, que permite a los solistas explorar con total libertad. Grandes figuras como Nicky Marrero, Ray Romero y Eladio Pérez son algunos de los percusionistas participantes.
Aunque la salsa es la base, y el soneo impecable de Ismael Quintana así lo demuestra en cada frase, la influencia del jazz latino y el funk es innegable. Temas como V. P. Blues y Chocolate ice cream muestran la inclinación de Palmieri por los grooves sincopados, las líneas de bajo potentes y una armonía más abierta, características que lo diferencian de muchos de sus contemporáneos. La experimentación con el órgano Hammond es un claro ejemplo de esta fusión, añadiendo una textura soul y blues al sonido salsero.
Si bien la mayoría de los temas se centran en el baile, hay momentos de profunda relevancia social. La inclusión de la recitación de Felipe Luciano en Sing Sing no solo aportaba un elemento poético y político al concierto, sino que también conectaba la música directamente con las realidades sociales y raciales de la época, reforzando el mensaje de la salsa como voz de la comunidad latina.
Legado genuino
Estos álbumes en vivo de Palmieri son más que simples grabaciones, son documentos históricos de una era dorada de la música latina. Ambos capturan la esencia del "sonido durísimo" de Palmieri, su incansable búsqueda de la perfección musical y su compromiso con la expresión auténtica. Estos discos continúan siendo puntos de referencia para músicos y aficionados a la salsa, inspirando a generaciones a explorar los límites del género.
En un momento en que la música en vivo era la máxima expresión de un artista, Palmieri entregó actuaciones que definieron su carrera y consolidaron su lugar como leyenda viva de la salsa. Su música en estos álbumes trasciende el tiempo, invitando a los oyentes a sumergirse en la furia, la improvisación y la innegable magia de Eddie Palmieri en su elemento más natural: el escenario.
Kike Gavilán