Templanza económica | El conocimiento y la innovación...
Para el desarrollo integral
13/06/2025.- La economía basada en el conocimiento y la innovación productiva constituye un eje fundamental de integración en la economía aplicada. Ambos aspectos se articulan en un ciclo virtuoso. Los avances teóricos impulsan mejoras concretas; la innovación genera y difunde nuevos conocimientos en procura de soluciones, optimizando procesos, productos y servicios y retroalimentando el acervo científico, mientras que la investigación básica y aplicada nutre los adelantos técnicos. Esta interacción forma parte de un ecosistema orientado a la transformación productiva, social y cultural. Su esencia radica en utilizar los activos intangibles para catalizar el progreso socioeconómico y convertir las creencias y los paradigmas productivos tradicionales. Aquí interactúan factores como la formación especializada, la transferencia de competencias, la actualización educativa y la difusión sistemática de los hallazgos científicos desde una visión de totalidad.
Venezuela posee recursos estratégicos, entre ellos, energía abundante y talento humano, para consolidar una profunda transformación productiva. Urge, entonces, superar la cultura rentista y la ética forjadas durante los últimos cien años, sustentadas en el simple ejercicio de la propiedad sobre un recurso natural, un capital no producido propiamente dicho. La potencialidad petrolera ha servido para establecer un modelo económico que demanda reinvención a causa de múltiples factores, fundamentalmente la coyuntura de su acelerado agotamiento y las medidas coercitivas y el bloqueo aplicados por el imperialismo.
En medio del asedio, la ciencia y sus aplicaciones prácticas emergen como instrumentos clave para garantizar la reproducción e innovación material de una sociedad socialista en construcción. Por tanto, la ciencia para la vida al servicio del colectivo, dentro de los preceptos de la democracia participativa y protagónica, en búsqueda de la distribución equitativa de la riqueza creada y la más amplia inclusión social, orienta un modelo de economía basado en el conocimiento integrado.
Se trata de construir una metodología para impulsar el desarrollo centrado en el uso intensivo del conocimiento y la innovación productiva, integrar los recursos intangibles y las relaciones intergeneracionales, sin descuidar los activos tradicionales disponibles como los recursos naturales, el acervo industrial y el capital acumulado.
Operativizar este modelo de desarrollo exige actualizar los contenidos de formación integral y especializada y, asimismo, optimizar las redes colaborativas. También se necesitan tecnologías habilitantes, amplias plataformas digitales, manejo de datos e inteligencia artificial para agilizar el procesamiento y el intercambio de información. Además, se debe valorar la carga ambiental.
Es requisito promover un adecuado manejo de la propiedad intelectual, las patentes, marcas y derechos de autor, esenciales para alentar la creatividad, la transferencia de tecnologías y proveer incentivos a los creadores e innovadores. También, fortalecer la arquitectura institucional con políticas claras e inversión estratégica público-privada en investigación y desarrollo. Finalmente, debe fortalecerse la colaboración intersectorial creando núcleos de conglomerados que vinculen la academia, la industria y el Estado, alineando entre sí las estrategias de generación de conocimiento con los objetivos históricos del Plan de la Patria (7T).
El modelo de desarrollo basado en la economía del conocimiento integrado a construir debe conformar un sistema donde el esfuerzo productivo sea eje integrador que se sirva de la generación, distribución y uso del conocimiento, entendiendo y extendiendo la innovación en función del crecimiento y desarrollo socioproductivo. Representa el cambio de viejos paradigmas por los paradigmas emergentes de creación de valor, participando directamente en el hecho productivo a través del talento y la mejora constante, para transformar la industria, la sociedad y la cultura, inmersos en los valores de la solidaridad y la ética del trabajo como espacio creativo.
Marcial Arenas