12/09/25.- El Gobierno de Brasil manifestó su rechazo enérgico a las declaraciones del secretario de Estado de EEUU, Marco Rubio, quien advirtió que su país respondería "en consecuencia" a la condena de 27 años y tres meses de cárcel impuesta al expresidente Jair Bolsonaro, calificándola de "caza de brujas".

La Cancillería brasileña afirmó que estas amenazas "no nos intimidarán" y destacó la independencia del Poder Judicial, que llevó a cabo el juicio de los acusados del intento golpista de 2023, garantizando el derecho a la defensa y señalando que la actuación judicial fue una respuesta al golpe.

Brasil reafirmó su postura de defender la soberanía nacional frente a cualquier injerencia externa y anunció que continuará protegiendo su integridad frente a agresiones.

 

 

 

 

 

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Foco de tensiones

La condena de Bolsonaro generó tensiones entre Washington y Brasilia. Mientras EEUU, a través de Rubio, acusó la sentencia de ser una persecución política y prometió responder, el presidente Lula da Silva defendió la independencia de las instituciones judiciales brasileñas, advirtiendo que cualquier intento de interferencia viola la soberanía del país.

Trump, por su parte, asegura que Bolsonaro es inocente y utilizó el juicio para justificar la imposición de aranceles a Brasil, lo que fue rechazado por Lula, quien indicó que las decisiones judiciales corresponden exclusivamente a la justicia brasileña, sin injerencias externas.

El conflicto se agravó con declaraciones de la Casa Blanca, en particular de Karoline Leavitt, quien sugirió que EEUU podría usar su poder económico y militar para defender la libertad de expresión globalmente.

Frente a esto, el Gobierno de Lula reiteró que la protección de la democracia requiere respetar la voluntad popular y que no aceptarán sanciones económicas o amenazas que atenten contra su soberanía, reafirmando su compromiso con la autonomía del país frente a presiones externas.

Rubio promete que EEUU responderá

El secretario de Estado de EEUU, Marco Rubio, advirtió que su país responderá a lo que calificó como una "caza de brujas" tras la condena de Jair Bolsonaro a 27 años de cárcel por liderar una asonada golpista en 2023. El funcionario criticó al Supremo Tribunal Federal de Brasil y a su presidente, Alexandre de Moraes, por lo que consideró persecución política y violaciones de derechos humanos.

La declaración muestra la postura de EEUU en contra de la condena, amenazando con una respuesta, y refleja las tensiones entre ambos gobiernos respecto a la justicia brasileña y su independencia.

FIDEL ANTILLANO / CIUDAD CCS