22/06/25.- El Congreso de Estados Unidos condenó el ataque militar contra tres instalaciones nucleares en Irán, señalando que la acción constituye una violación flagrante de la Constitución, ya que no contó con la aprobación previa del legislativo. Esta decisión presidencial generó una fuerte reacción política bipartidista, con muchos legisladores cuestionando la legalidad del bombardeo y exigiendo explicaciones sobre los procedimientos constitucionales que la Administración de la Casa Blanca aparentemente ignoró.

Mientras tanto, en actos públicos, los ciudadanos abuchearon la decisión de ordenar los bombardeos sin autorización del Congreso, reflejando un rechazo popular a la acción militar unilateral del gobierno. La situación ha provocado un intenso debate en Washington sobre los límites del poder presidencial en decisiones de guerra y la importancia del cumplimiento de los procedimientos constitucionales en la política exterior estadounidense.

Republicanos toman distancia

El congresista republicano, Thomas Massie, expresó en redes sociales que la acción militar anunciada por Trump "no es constitucional", señalando que la decisión de lanzar el ataque violaba el principio fundamental de que solo el Congreso tiene la autoridad para declarar la guerra. Este comentario representó una ruptura importante dentro del Partido Republicano, que generalmente ha apoyado las decisiones de política exterior del presidente Trump, pero que en este caso cuestionó la legalidad del uso unilateral de la fuerza por parte del Ejecutivo.

Aunque otros miembros republicanos compartieron reservas similares en conversaciones privadas, la mayoría evitó pronunciarse públicamente para mantener una postura prudente. Fuentes del Capitolio indicaron que existe una diversidad de opiniones dentro del partido respecto a la decisión de Trump, y que algunos legisladores están preocupados por la vulneración del principio constitucional de la autoridad legislativa en decisiones militares.

Demócratas preparan investigación

El congresista demócrata Jim Himes, miembro del Comité de Inteligencia, resaltó que los congresistas deben tener una voz en decisiones militares antes de que se efectúen acciones como bombardeos, destacando la importancia del proceso deliberativo para garantizar que se respeten las prerrogativas constitucionales. En respuesta a la intervención militar anunciada por la administración Trump, la bancada demócrata está preparando una resolución formal para investigar las circunstancias del ataque y analizar las posibles implicaciones legales por violar estos principios constitucionales.

Durante un acto público con la presencia del senador Bernie Sanders, la audiencia reaccionó con abucheos y consignas contra la guerra cuando Trump mencionó el bombardeo a instalaciones nucleares iraníes, evidenciando el rechazo popular a una nueva escalada militar en Medio Oriente. Los asistentes expresaron su oposición a la intervención, demandando el cese de las intervenciones militares estadounidenses en la región y mostrando su desacuerdo con cualquier conflicto armado con Irán.

Sanders, conocido por su postura crítica frente a las aventuras militares, aprovechó la ocasión para recordar las "desastrosas consecuencias" de intervenciones previas en Irak, Afganistán y otros países. Además, expertos constitucionales advirtieron que estas acciones unilaterales crean un precedente peligroso que podría facilitar futuras decisiones militares sin el aval del Congreso, poniendo en riesgo los principios democráticos y las garantías constitucionales en materia de autorización de la fuerza.

António Guterres cuestiona el ataque

Por su parte, António Guterres, secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, expresó su profunda preocupación por el ataque de EEUU a Irán, calificándolo como una escalada peligrosa en una región ya inestable y una amenaza a la paz y seguridad internacionales. Alarmado por el uso de la fuerza, advirtió que existe un alto riesgo de que el conflicto se intensifique y salga de control, con consecuencias catastróficas para civiles y la región. Guterres hizo un llamado a los países para que cumplan con sus obligaciones bajo la Carta de la ONU y otras normas internacionales, resaltando que no hay solución militar y que la única vía posible para avanzar es la diplomacia y la paz.

CIUDAD CCS