19/06/2025.- La Orquesta Anacaona, fundada en 1932 en La Habana, Cuba, no es solo una agrupación musical, es un fenómeno cultural y un ejemplo de perseverancia que ha trascendido décadas, géneros y fronteras, erigiéndose hasta el sol de hoy como un símbolo de la fuerza, el talento y la resiliencia de la mujer cubana en el ámbito artístico. Su legado no es solo musical, sino también social, abriendo caminos y rompiendo barreras para las generaciones futuras de mujeres artistas.

La orquesta fue nombrada así en honor a la cacica taína Anacaona, líder y poetisa que se rebeló contra los colonizadores y fue salvajemente asesinada, convirtiéndose en un símbolo de resistencia y dignidad. Esa misma que en la década de 1970 fue homenajeada en la canción homónima compuesta por Tite Curet Alonso e interpretada magistralmente por Cheo Feliciano. La Orquesta Anacaona, que reflejaba ese mismo espíritu audaz y valiente, no pudo tener un mejor nombre.

El surgimiento de la Orquesta Anacaona se dio en un contexto donde la sociedad era predominantemente patriarcal y las mujeres tenían roles muy definidos. La idea de que un grupo de mujeres jóvenes pudiera no solo tocar instrumentos sino también liderar una orquesta y actuar profesionalmente era revolucionaria. Las hermanas Castro, un grupo de talentosas músicas, lideradas por Concepción “Cuchito” Castro, fueron las visionarias detrás de este proyecto. Ellas, con determinación y una pasión inquebrantable por la música se atrevieron a formar un septeto de son exclusivamente femenino que pronto capturó la atención del público y la crítica. Su debut en el Teatro Payret de La Habana en 1932 marcó el inicio de una leyenda.

Musicalmente, Anacaona fue una orquesta versátil que interpretó una amplia gama de géneros cubanos, desde el son y el chachá hasta el mambo y la guaracha. Pronto pasaron de ser un septeto a ser una big band que se daba por igual en géneros cubanos como en el jazz. Su sonido era distintivo, caracterizado por la habilidad individual de sus integrantes y la cohesión de sus interpretaciones. No eran solo una novedad por ser mujeres, eran ejecutantes excepcionales que dominaban sus instrumentos y poseían un profundo conocimiento de los géneros y ritmos cubanos. Concepción, Ada, Alicia, Algimira, Caridad, Olga, Ondina y Xiomara Castro, junto a Bertha Cabrera, Isabel Álvarez y Elia O´Reilly fueron las integrantes fundadoras.

Trayectoria y éxito internacional

El ascenso de la Orquesta Anacaona fue meteórico. En 1935, realizaron su primera gira internacional a Puerto Rico, y en 1936 conquistaron México, país donde cosecharon grandes éxitos, grabando incluso para películas de la época dorada del cine mexicano como Mujeres de teatro y La noche es nuestra. Las décadas de 1930 y 1940 fueron testigos de su consolidación, grabando con la prestigiosa disquera RCA Victor y realizando extensas giras por América Latina, el Caribe y Europa.

A lo largo de los años, la orquesta tuvo entre sus filas a otras talentosas artistas como Omara Portuondo “La Diva del Feeling”, lo que subraya la calidad y el magnetismo de la agrupación. La Orquesta Anacaona no solo interpretó los ritmos cubanos tradicionales y el jazz, sino que también se abrió a nuevos géneros como la salsa y la timba, adaptándose a los tiempos sin perder su esencia.

Un legado duradero

En 1983, tras la muerte de Concepción Castro, la Orquesta Anacaona inició un nuevo ciclo. Las hermanas Georgia y Dora Aguirre, jóvenes músicas formadas en el Conservatorio Amadeo Roldán de Cuba, asumieron la dirección, inyectando sangre nueva a la orquesta mientras mantenían el espíritu y el legado de las fundadoras. Esta transición permitió que la orquesta continuara su camino adaptándose a las tendencias musicales contemporáneas y colaborando con importantes figuras de la música cubana. Su longevidad es asombrosa. Han logrado mantenerse activas por más de noventa años, un hito que pocas agrupaciones en el mundo pueden igualar.

La discografía de la Orquesta Anacaona es un testimonio de su versatilidad y evolución. Desde sus primeras grabaciones con RCA Victor hasta las producciones más recientes, la orquesta ha explorado un amplio repertorio. Álbumes Como un milagro (1996), Lo que tú esperabas (2000), Llora si te duele (2013) y el más reciente Gracias a la música (2024), muestran su capacidad para reinventarse y mantenerse relevantes en la escena musical. Han logrado fusionar la tradición con la modernidad, interpretando tanto temas clásicos del repertorio cubano como composiciones originales que llevan su sello distintivo.

La Orquesta Anacaona es una institución musical, un símbolo de empoderamiento femenino y un baluarte de la cultura cubana. Su historia es la historia de la lucha, el talento y el triunfo, dejando un legado imborrable que sigue resonando. Anacaona continúa demostrando que la música no solo es arte sino también una poderosa herramienta para el cambio social y la afirmación de la identidad.

Kike Gavilán