Papa León XIV pide paz a 80 años del fin de la Segunda Guerra Mundial
Su Santidad exige el cese inmediato del fuego en Gaza y entrega de ayuda humanitaria
11/05/25.- En el marco del 80º aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, el Papa León XIV alzó su voz con un contundente llamado a la paz global, en línea con el legado pacifista de su predecesor, el papa Francisco, quien solía proclamar con fuerza: “La guerra es siempre una derrota”.
Durante un emotivo pronunciamiento desde la plaza de San Pedro, León XIV expresó: “En este dramático escenario de una tercera guerra mundial en pedazos, me dirijo a los grandes del mundo con un llamamiento siempre actual: ¡Nunca más la guerra!”. Con estas palabras, el nuevo sucesor de San Pedro reavivó el espíritu de esperanza y reconciliación frente a los múltiples conflictos que hoy golpean al planeta.
En un contexto de violencia persistente en Medio Oriente, León XIV exigió el cese inmediato del fuego en Gaza, la liberación de los rehenes y la urgente entrega de ayuda humanitaria a la población civil.
“Estoy profundamente triste por lo que está sucediendo en la Franja de Gaza. ¡Alto el fuego inmediatamente! Que se proporcione ayuda humanitaria a la población civil agotada y que todos los rehenes sean liberados”, añadió con voz conmovida.
Además, el Papa celebró con esperanza el reciente alto el fuego entre India y Pakistán, dos naciones con una historia marcada por tensiones fronterizas.
“Me complace el anuncio del cese del fuego entre la India y el Pakistán, espero que a través de las próximas negociaciones se alcance pronto un acuerdo duradero”, expresó.
El pontífice manifestó su profunda cercanía al pueblo ucraniano, que aún sufre las consecuencias de una guerra prolongada.
“Llevo en mi corazón los sufrimientos del querido pueblo ucraniano. Que se haga todo lo posible para lograr lo antes posible una paz auténtica, justa y duradera. Que todos los presos sean liberados y que los niños regresen con sus familias”, declaró.
Con tono firme, pero esperanzador, León XIV insistió en la responsabilidad moral de los líderes mundiales para detener el avance de los conflictos armados y fomentar el entendimiento entre naciones. Su mensaje resonó con fuerza entre miles de fieles congregados y fue replicado ampliamente por medios internacionales.
A ocho décadas del fin del conflicto más devastador del siglo XX, el llamado del Papa no solo evoca el recuerdo de una tragedia global, sino que reitera la urgencia de no repetirla.
CIUDAD CCS