Mundo alerta | Exxon: ¿mano inocente en el Esequibo?
06/10/2025.- Recientemente, ExxonMobil anunció el descubrimiento de otro yacimiento petrolero (el séptimo), con capacidad para 900 mil barriles diarios, una cifra superior a la producción de los países petroleros latinoamericanos, excepto Brasil y México, que ocupan el primer y segundo lugar.
El pozo está ubicado en el estratégico bloque Stabroek, del Esequibo. Un detalle muy particular desde hace tres años, cuando el experto petrolero venezolano Carlos Mendoza Potellá advirtió que ExxonMobil es "un poderoso instrumento geopolítico de Estados Unidos para asegurar el control de todos los recursos energéticos disponibles del planeta". En medio de las acciones militares en las fronteras aéreas y marítimas de América Latina, la denuncia ha pasado inadvertida. Algunos aliados de Estados Unidos ponen en duda que ese país esté interesado exclusivamente en combatir el tráfico de drogas. Uno de ellos, el almirante retirado, exjefe del Comando Sur y exasistente militar del secretario de Defensa de Estados Unidos, James G. Stavridis, lo manifiesta abiertamente: "El envío de los diferentes buques, misiles e inclusive un submarino militar por parte de Estados Unidos en dirección a las fronteras marítimas venezolanas, con el fin de limitar el narcotráfico, es un engaño". Y advirtió: "La mayor parte de la droga es transportada por vía aérea", no marítima, y la finalidad del despliegue es "enviar un mensaje directo a Maduro", aunque no precisó la segunda intención de la frase.
Stavridis no es un improvisado; fue redactor y firmante principal del plan de invasión a América Latina, elaborado por el Comando Sur entre 2008 y 2020, que contemplaba el "empleo de fuerzas estratégicas y armas de destrucción masiva, guerras de teatro principal y conflictos regionales en el hemisferio sur". "Casi la mitad del continente puede ser cubierto por un C-17 sin recarga de combustible desde la base militar de Palanquero" (Colombia), describió Stavridis en aquella ocasión. En ese contexto, luce oportuno que Estados Unidos explique con claridad el propósito final de la militarización fronteriza en América Latina.
Raúl Pineda