Comentarios noticiables | Al margen de la ley
Un asunto nada constructivo
14/06/2025.- La oposición al margen de la ley encabezada por Juan Guaidó, Leopoldo López, María Corina Machado, Julio Borges, Antonio Ledezma y Edmundo González, entre otros, cuenta con el apoyo de la administración del gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica (EE. UU.) y de algunos de sus aliados en Europa. Las causas o los motivos de este deterioro son la codicia, la ficción de la dulce vida, la traición a la patria, la mentira, la impunidad, la alianza con el narcotráfico, el robo, el paramilitarismo, el comportamiento pitiyanqui, la corrupción, el terrorismo y la muerte. Todos son actos que se convierten gradualmente en normales y ellos los viven sin ningún espasmo.
Estos mencionados opositores poseen varias cuentas bancarias en EE. UU. y en Europa, producto, en la mayoría de los casos, de la legitimación de capitales y/o el lavado de dólares (activos depositados en más del 50% en bancos off shore). La mayoría de estos opositores cuenta con certificado de residente, pasaporte norteamericano, certificado de nacionalidad de ese país y otros documentos de identificación. Así es como esa ultraderecha en Venezuela ha contribuido a mantener las reminiscencias del pasado, contrarias a todo lo que significa democracia socialista. Esto lo ha difundido y sigue difundiendo la basura mediática con mensajes antinacionales y discriminatorios.
El servilismo de esa oposición al margen de la ley es tal que cuando asiste como invitada a programas de la televisión privada no escatima esfuerzo alguno en elogiar la cultura de la clase seudovenezolana dominante, colonizada y defensora de la colonización. Esa que actúa como apéndice de las clases extranjeras dominantes, europeas y, en especial, norteamericanas, en detrimento del proceso revolucionario bolivariano, enaltecedor del desarrollo de los valores, tradiciones, culturas y costumbres que nos revalúan como país. El venezolano actual es un pueblo altivo y organizado que sabe que esto forma parte de su identidad y está consciente del artículo primero de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que afirma: "La patria es irrevocablemente libre e independiente y fundamenta su patrimonio moral y sus valores de libertad, igualdad, justicia y paz internacional en la doctrina de Simón Bolívar, el Libertador".
La oposición venezolana violenta y terrorista ha conseguido apoyo para su "retorcida vida política" de los sectores más reaccionarios de Washington, Londres, Bélgica, París, Madrid, Berlín y de algunos gobiernos latinoamericanos proestadounidenses. A estos sectores no les entristecen los derechos irrenunciables de los habitantes de la República Bolivariana de Venezuela sobre aquello que constituye el aprovechamiento más eficaz de los recursos naturales y humanos y el crecimiento y la diversificación de la industria nacional para la eliminación de la dependencia de la producción extranjera. Ahora, en nuestro país, es satisfactoria la capacidad del consumo alimenticio en renglones sobre un 90% de producción agrícola, que aumentan progresivamente los niveles de vida de nuestros habitantes.
Los seguidores de la oposición al margen de la ley están muy descontentos por la política electoral, sobre todo por los argumentos que sus jefes esgrimen en cuanto a la convocatoria del Consejo Nacional Electoral (CNE) a las elecciones a cargos de representación popular de los poderes públicos. Estos opositores ultraderechistas siempre adoptan una postura de no participación en los comicios porque están seguros de una inevitable derrota. Su contradicción es tal que, divididos, se acercan a una situación gravosa por falta de confianza.
¿Por qué? Porque lo cierto es que el CNE ha garantizado la igualdad, confiabilidad, imparcialidad, transparencia y eficiencia de los procesos electorales, así como la personalización del sufragio y la representación proporcional. Así, el CNE ha conservado siempre el principio de la votación secreta.
¿Para qué? Un hecho irrebatible de la no participación en el pasado proceso electoral por parte de la oposición que se sitúa al margen de la ley indica que deben aplicarse medidas neutralizadoras a los dirigentes que promovieron las infracciones de la ley, es decir, a aquellos sujetos cuyas intolerancias pudieron causar delitos de un profundo sentido social. El pueblo pide al Estado que situaciones peligrosas como las dirigidas por la oposición violenta, con el consentimiento de Washington, deben frenarse a tiempo, como se ha venido efectuando con la inteligencia adecuada.
Esto da a pensar que la oposición al margen de la ley no es un asunto nada constructivo. Sin embargo, en las próximas elecciones pueden modificarse criterios acerca de la democracia por medio del uso de medidas de persuasión y coerción que pudieran generar una profilaxis.
J. J. Álvarez